¿Cómo disminuir el consumo de sus puertas automáticas?

Una de las cuestiones que con mayor frecuencia tienen nuestros clientes es la referente al consumo del motor de su puerta automática. En este artículo, vamos a intentar darle algunos datos de su consumo, además de consejos para disminuir el consumo de sus puertas automáticas.

En ocasiones solemos pensar que por abrir varias veces durante el día nuestra puerta de garaje automática, vamos a incrementar de forma considerable la factura eléctrica de nuestra vivienda.

Se trata de una creencia completamente errónea, debido a que, en primer lugar, el motor consume únicamente energía cuando está en movimiento, debido a que la energía que necesita para mantener operativo el cuadro de maniobras es mínimo, parecida a la que consume su televisión cuando está con el punto rojo o naranja (stand by).

Aparte a esto, cuando el motor se encuentra en movimiento tiene un mínimo consumo, incluso los que funcionan a 220V, porque su consumo fluctúa entre los 200W hasta los 800W los más potentes (y esto durante los 25 segundos que puede durar la apertura). Si optamos por un automatismo a 24V su consumo resulta inapreciable del todo.

Recomendaciones para disminuir el consumo de sus puertas automáticas

No obstante, si, pese a esto, quiere reducir al máximo posible el gasto energético, os daremos algunos consejos para ayudaros a disminuir el consumo de sus puertas automáticas.

Incrementar el tiempo de espera en el cierre automático

En el caso de que las puertas automáticas sean para comunidades de vecinos, siempre aconsejamos incrementar el tiempo que la puerta se encuentre parada antes de comenzar a cerrarse. El argumento es muy sencillo.

Por lo general, siempre encontramos que hay horas punta en el que prácticamente el 80% de los vecinos salen y entran al garaje. Por ejemplo, a las 8:00 salen para ir a trabajar, los que salen antes de las 9:00 es para llevar a sus hijos al colegio, a las 15:30 los que vuelven a comer… y así son las horas en las que hay mayor tráfico.

Si al motor le ponemos un tiempo de espera más amplio, seguramente en cada apertura salga más de un vehículo, con el consecuente ahorro de operaciones del motor.

Esto se hace no solo desde el punto de vista del ahorro energético, sino también para darle mayor tiempo de vida útil a nuestro automatismo. Así que con esta medida obtenemos un doble ahorro.

Abrir la puerta cuando sea estrictamente necesario

En demasiadas ocasiones abrimos las puertas automáticas del garaje completamente cuando vamos a salir andando. A los motores se les puede programar que, cuando realice una segunda pulsación en el mando, este se pare, por lo que una vez cruce la puerta debe parar el motor y volver a cerrar la puerta. Estará disminuyendo más de un 50% el recorrido de la puerta con el consecuente ahorro de energía.

Conservar la puerta en perfectas condiciones

Lógicamente, cuanto mayor suavidad tenga el funcionamiento de la puerta automática, menor fuerza precisará el motor para su apertura y cierre, lo que lleva a una reducción en su consumo.

Por tanto, debemos tenerla a punto mediante servicios de mantenimiento de sus componentes.

Instalar un automatismo acorde a la puerta

No porque el motor sea mejor, le va a dar mejores resultados. Aparte de que resulta un gasto innecesario en el precio, estará subiendo su consumo de energía ya que, generalmente, esta clase de motores duplican su consumo al de motores para puertas residenciales.

Siempre es aconsejable instalar un motor que rebase el peso normal de la puerta porque en el futuro ésta irá con tanta suavidad por falta de barro en las guías, engrase o cualquier otra circunstancia, pero con instalar un motor que duplique el peso de la puerta es suficiente.